En Colombia, la idea de nutrirse con lombrinces no es descabellada. Los lombricultores se han establecido y hace pocas semanas la Asociación de Zootecnistas de Antioquia (Azoodea) dictó un curso sobre la producción y utilización de la lombriz.
Este tuvo como objetivo central el de que los cultivadores tomen conciencia del potencial industrial y pecuario que se fragua bajo la tierra. Fuerte potencial de explotación que tan sólo necesita un metro caudrado de tierra húmeda, desechos orgánicos, y una semilla adecuada conocida como lombriz californiana , capaz de producir entre 40 y 50 lombrices.
Se trata de un híbrido traído de Estados Unidos, doméstico y prolijo en comparación con nuestra común lombriz de tierra.
Los lombricultores sostienen que ésta posee un 65 por ciento de proteína. Y como fuente proteínica la lombriz se utiliza en la elaboración de productos para el consumo humano como hamburguesas, paté, seviche, harina de pescado y para acompañar determinados alimentos.
La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) elabora galletas con base en harina de lombriz y las envía a países del tercer mundo.
Económicamente los lombricultores defienden su actividad. Dicen que mientras en tres años y medio, en una hectárea se cría un bovino, con un peso aproximado de 550 kilos, en ese mismo espacio y durante un año se pueden cultivar millares de lombrices que se convertirán en 80 toneladas de carne fresca y de menor costo.
A pesar de ser difícil cambiar el régimen alimenticio de nuestra plobación, los lombricultores afirman que se trata de un problema de cultura. Para muchas personas es igualmente desagradable un plato de camarones y para otros son bocado de cardenal , dicen.
Si bien es cierto que en el país la industria alimenticia con base de lombriz no ha tenido un desarrollo vertiginoso, se han hecho muchos experimentos y en todos los resultados sobre las bondades nutritivas de este anélido son favorables.
Por ejemplo, la ingeniera de alimentos Jenny Acuña, de la Asociación Colombiana de Lombricultores, dijo recientemente a EL TIEMPO que ya ha logrado preparar paté y diversos tipos de salchichas.
Confirmó igualmente que ha llegado a ensayar seviche, pan y hasta compota para bebé.
Los exportadores miran hacia los países asiáticos, cuyos habitantes han incluído la carne de lombriz en su dieta diaria. Por lo pronto, los lombricultores antioqueños trabajan en la producción de concentrado para animales, a base de lombriz.
La lombriz es hermafrodita. Sin embargo, para reproducirse necesita aparearse. Cada siete días pone un huevo, del que, al cabo de 21 días, salen de dos a 21 lombrices que alcanzan a vivir 15 años.
Esto siempre y cuando no se conviertan en el manjar de los pájaros, ratones y hormigas, sus principales enemigos. O del hombre, su nuevo cliente consumidor... Bocado de cardenal Tome una taza de lombrices frescas (en los supermercados o en los criaderos le venden por kilos la lombriz roja o californiana).
Lave las lombrices con abundante agua pura o con sal o en vinagre.
Después píquelas en pequeños trozos.
Tome la taza de lombrices y póngalas a cocinar por 15 minutos en un cuarto de litro de agua.
Agregue una taza de avena, cebolla cortada finamente, una cucharada de aceite, dos huevos, sal y pimienta.
Sirva caliente con galletas, pan o tostadas y... prepárese para saborear el más delicioso paté. Sin duda sus invitados y familiares alagarán su agradable cocina. Buen apetito!
